viernes, 25 de junio de 2010

OBEROM - vivir de luz - viajando na luz

Conciencia Pránica o Vivir en Puro estado de Felicidad, baseado na experiencia de Vivir de Luz  nombre basado en el libro de la australiana Jasmuheen, que enseña técnicas canalizadas por los Maestros Ascendidos, permitiendo que a partir de un retiro de 21 días una persona común pueda alimentar-se exclusivamente de energía vital o prana.



Este és el tema abordado en el taller, que tiene por finalidad divulgar esta posibilidad y traer una reflexión sobre los valores de nuestra sociedad actual. Este primer contacto con el tema es el inicio de la rotura de patrones limitantes arraigados en el inconsciente de cada ser. El contenido está basado en la experiencia personal, vivenciadas desde 2001; también en el intercambio con Jasmuheen y en la experiencia adquirida en acompañar el proceso iniciático de más de 400 personas de 28 diferentes naciones.

Conciencia Pránica

Nacido el 23 de agosto de 1984.
Formado en Educación Física por la Unincor - Universidade Vale do Rio Verde - Brasil (2007).
Especializado en Yoga por la FMU - Faculdades Metropolitanas Unidas, São Paulo, Brasil.
Miembro del Consejo de ABRASCA - Associação Brasileira de Comunidades Alternativas.
Facilitador del Proceso de 21 días - Alimentación Pránica.

Autor do libro Viajando na Luz (2008).













OBEROM, Conciencia Pránica from La Caja de Pandora on Vimeo.



Me han dicho que usted no come.
No me gustaría centrar la charla en eso.
¿Es un yogui?
Practico yoga desde niño. Me enseñaron mis padres: siendo veinteañeros dejaron la ciudad para vivir en el campo y cultivar sus propios alimentos. Y allí nacimos sus diez hijos.
¡Diez!
Decidieron dejar a la naturaleza seguir su curso… Sin anticonceptivos. ¡Y sin televisor!

¿Qué les llevó al campo?
Las ansias de vivir con conciencia y fieles a la naturaleza. Se hicieron vegetarianos, y así nos criaron.

¿Nunca ha comido carne?
No. En casa somos veganos: ni comemos ni usamos nada de origen animal, nada que provenga de algún sufrimiento animal.

Por ejemplo…
No montamos caballos ni usamos animales para labrar. Ni usamos cosméticos que hayan sido testados con animales.

Pues sepa que el ser humano es omnívoro y que hemos comido mucha carne.
Muy poquita mientras fuimos nómadas cazadores- recolectores. Y justamente desde que somos sedentarios y ganaderos empezaron los problemas de territorialidad, las guerras… ¡Comer carne trae desgracias!

¿Cuántas más?
Dedicar enormes extensiones agrarias a cultivar pienso para ganado: ¡miles de personas podrían comer con esos vegetales!
¿Algún otro perjuicio de la carne?
Medioambiental: la ganadería contamina tierras, aguas y aires, cada vaca expele 500 litros de metano a la atmósfera con sus ventosidades, ¡y es un gas muy venenoso!
Así, creció usted como yogui vegano…
Sí, fue así hasta hace nueve años. En ese momento empezaron a llamarnos locos…

¿Locos? ¿Por qué?
Mi madre empezó a seguir los ejemplos de Teresa Neumannn, de Paramahansa Yogananda, de Jasmuheen, de Giri Bala

¿Quiénes son esas personas?
Personas cuya toma de conciencia les dota de tal dominio de su metabolismo, que pueden prescindir de ingerir alimentos sólidos.
Repita esto: no sé si le he entendido…
Que son personas que no comen nada. Mi madre siguió el preceptivo retiro iniciático, que incluye ayunar 21 días seguidos.

¿Y cómo quedó su imprudente madre?
Muy contenta, feliz, serena.

Eso es imposible: si no comes, mueres.
Mediante un cambio de tus estructuras de conciencia, puedes conseguir un cambio de tu memoria celular.

Eso es palabrería, lo lamento.
Yo llevo nueve años sin comer alimento sólido alguno. Sólo me tomo cuatro zumos de frutas por semana.

No me lo creo: no le veo nada famélico.
Entiendo que no me crea, porque esto es algo muy raro. Pero que yo no coma alimentos sólidos… no significa que no me nutra.
¿Y de qué se nutre? ¿De esos zumitos?
De prana: es la energía sutil en que estamos inmersos, está en todas partes, en los átomos… Una meditación activa, un estado de conciencia atento, presente, observante, ¡permite captarla y nutrirse de esa energía!

Yo no jugaré con mi salud ni moriré de inanición: ¡su discurso es insostenible!
Hablo para buscadores de paz interior, no de hacer un ayuno ni de adelgazar, ¿eh?

Seguro que adelgazas si no comes, ¡pero también entras en coma y mueres!
Tras los primeros 21 días yo perdí seis kilos, pero a los tres meses de nutrirme de prana ya había ganado siete kilos.
Déjese de locuras: tome esta aceituna.
¡No! El otro día estaba trabajando en el campo con unos campesinos y me ofrecieron unos buñuelos de batata y mañoca: tuve que aceptarlos para no desairar su hospitalidad.

¿Estaban sabrosos?
Mucho, mucho…

¿Lo ve, qué bien? ¿Qué dice la ciencia?
Algunos médicos están investigando a personas como Hira Ratam Manek, que llevan años sin comer, o a Pralad Jani, de 80 años, que no come nada desde los 10 años.

¿Y qué pasa con sus intestinos, eh?
Se atrofian algunas funciones de absorción y las excretoras, pero siguen secretando sustancias hormonales reguladoras.

¿Hace usted proselitismo de esto?
No. Sólo hablo de búsqueda de autoconocimiento. Enfatizo en esto: no se trata ni de engordar el ego ni de adelgazar el cuerpo, ni de sanar enfermedades ni de un ayuno.

¿Y conoce a muchos buscadores?
Unas 500 personas lo han practicado en Brasil, bajo mi asistencia y la de mi familia. ¡No aconsejo hacerlo solo! El 10% desiste a los pocos días, y el resto sigue hasta los 21 días. Pero sólo un 5% persevera después.

¿Nadie les ha denunciado por esto?
Evelyn, una lectora de la obra de Jasmuheen, salió en televisión diciendo que vivía de luz, y otra mujer quiso imitarla… y murió. Su esposo denunció a Evelyn por incitación al suicidio. No sé cómo va el proceso…

Serán vistos como secta peligrosa…
Yo sólo formo parte de un grupo de personas cuyo propósito es acceder a un estado de conciencia de felicidad constante.
Si un día tiene un hijo, ¿qué le dirá?
No le diré que no coma, sólo que sea feliz.
Yo me siento feliz mientras comparto con amigos una buena comida y un vino.
Pues yo confío en que un día nos baste con compartir arte en vez de comida.

Fuente:la contra de la Vanguardia


OBEROM
Oberom, nacido el 23 de agosto de 1984, en una comunidad alternativa en el sur de Minas Gerais (Brasil) donde vive con veinte familias más que buscan una vida simple con pensamiento elevado.
Formado en Educación Física, con extensión en Yoga por la FMU, Sao Paulo. Post-graduado en Nutrición Humana y Salud por la UFLA – Universidade Federal de Lavras. Especializado en Yoga por el Instituto Lonavla a través de la FMU – Faculdades Metropolitanas Unidas en Sao Paulo.
Además de conferencias y talleres sobre temas relacionados con la Consciencia Pránica, Yoga y vegetarianismo, trabaja como facilitador del “Proceso de 21 días” en Portal Parvati, Minas Gerais (Brasil). Él es también autor del libro “Viajando en la Luz” (en portugués original y traducido al inglés)
Es profesor de Yoga registrado en Alianza de Yoga, formado en escuelas de Yoga en Brasil y una formación por el PVA School of Yoga en India. Iniciado por el Swami Prakashanayananda, Sri Lanka.
Junto a su familia, investiga y experimenta la Consciencia Pránica desde 2001 cuando realizaron el “Proceso de 21 días”. La familia siempre optó por los tratamientos naturales, la dieta vegetariana y una constante búsqueda del equilibrio del ser, de esta forma Oberom tiene junto a su familia el propósito del desarrollo espiritual a través de la investigación de sí mismo, el servicio al todo, el Dharma y la emanación de buenos flujos, Amor, Paz, Luz… a su entorno, a toda manifestación creadora.
Oberom reúne parte de sus experiencias con Vipassana, Yoga y estudios sobre el desarrollo del Yo Mayor, además del medio alternativo en el que vive, y transmita de una forma simple este contenido que en esencia consiste en básicamente Ser, lleva a los interesados reflexiones y principios que pueden ayudas en la realización de una vida más integrada y Feliz. Trabaja en esto desde 2003. Con más de doscientas conferencias y talleres en eventos, espacios holísticos y centros de Yoga, entre países de América del Sur, América del Norte, Europa y Ásia.
Consciencia Pránica
Es una forma de vivir conectado a la percepción de que todo es energía divina. Vivir en la frecuencia de la Felicidad, que nos permite acceder al vasto campo de infinitas posibilidades. Vivir en la Presencia.
Estar consciente de que la energía, que es el todo, se manifiesta en diferentes niveles de frecuencias vibratorias; a partir de esta consciencia, también se entiende que donde se coloca intención se crea un pulso que pone en movimiento la energía y moldea una nueva manifestación, ya sea en el campo físico o sutil.
La energía aquí llamada Prana, que puede ser mejor entendida como energía vital o fotones de luz, es una partícula de inteligencia cósmica que está y siempre estuvo en nosotros y en nuestro entorno, la materia está compuesta por este potencial immensurable; él de alma a los seres vivos, desarrolla funciones creativas en el plano material y en el campo invisible, también llamado Etérico.
Si podemos mover esta energía creativa a través de la intención, podemos modificar nuestra condición de ser limitado, podemos crear nuestra realidad conscientemente, libre de patrones limitantes. A partir de una toma de consciencia, vamos a reconocer que al moldear nuestra realidad vamos a afectar a la realidad de todo, entonces traemos la responsabilidad de impulsar solo buenos flujos en la creación de nuestro proyecto personal.
Tomando esta consciencia nos conectamos con esta fuerza divina que crea realidades favorables a la realización del plano divino individual, y que como parte del todo es el mantenimiento para una vida Feliz y Próspera; así estos niveles de frecuencia más elevados elevarán también el patrón vibratorio planetario.
Para mantenerse en esta frecuencia elevada que nos permita el estado de Felicidad Plena se precisa energía. Aquella necesaria para observar la calidad de los pensamientos, energía para observar los patrones internos de los cuerpos físico, mental y emocional, energía para dirigir nuestra intención al equilibrio, energía para mantenerse conectado a la consciencia. Que por fin nos revela el verdadero potencial.
Cuando observamos estamos en el presente y en él nos conectamos a lo que es real, en él sólo hay perfección, pues la consciencia sabe lo que puede cambiar y lo que no puede, y lo acepta. En el presente no existe lucha, no hay desgaste de energía con conflictos internos. El presente es la Presencia.
Despuçes de dirigir el prana para una limpieza en todas las extensiones de nuestro ser a través de la intención, tendremos la clara revelación de como nuestra energía se desvanece cuando estamos viviendo en pasado y el futuro (recuerdos,juicios, proyecciones y preocupaciones), se mostrará nítidamente quien es el ego, sólo la percepción de quien es él nos coloca en la posición de quien somos, el observador, nuestra divinidad se revela, a pesar de que siempre estuvo ahí.
Entonces, percibiremos que algunos elementos en nuestras vidas interfieren en nuestra frecuencia vibratoria, y encontramos el circuito de dispersión; por ejemplo, cuando tenemos pensamientos negativos o cuando comemos algo que tiene una baja frecuencia, como por ejemplo carne, que además de las toxinas también trae a nuestro ser el dolor, el sufrimiento, la violencia y el miedo, nuestra vibración es alterada, con eso tenemos un desequilibrio en el cuerpo físico, emocional y mental, perdemos mucha energía para digerir, recuperar nuestro centro y restaurar nuestro campo vibratorio original.
Sin esa energía tenemos dificultad para observar, así salimos del presente, perdemos la Presencia y dejamos el estado de Felicidad. Entonces caemos en nuestros dramas diarios, nos distanciamos de nuestro potencial y volvemos a ser guiados por el ego. Pasamos a liberar elementos no concientes, de baja frecuencia para el inconsciente colectivo, empezamos a producir pensamientos en la misma franja vibratoria, nuestras palabras pierden su poder y densificamos nuestra percepción sobre ellas distanciándonos del precioso silencio o del poder de la invocación y verdad; las acciones pasan a ser apenas una reproducción de los patrones ya establecidos en este nivel denso de vibración.
Conectándonos a esta potencial Universal, o prana, asumimos concientemente un mecanismo que nos ayuda a mantener el esta de Comunión y Amor de forma continua. Si elevamos nuestra frecuencia por encima de los niveles ordinarios, vamos activando capacidades más sutiles, como por ejemplo la posibilidad de vivir sin la dependencia de la comida. La inteligencia corporal sustituye o complementa la necesidad de alimentos dísicos para una alimentación procedente de Luz Divina o prana. Haciendo que no perdamos la energía para para observar y mantenenos en el presente; en el proceso digestivo perdemos más del 50% de nuestra energía, dentro de una dieta dicha “normal”.
El factor no comer o vivir básicamente de la energía del Amor, nos ayuda a mantenernos en una frecuencia más elevada sin tanto gasto de energía. Entonces entramos en el Cicuito de Sustento, donde percibimos que abastecerse de este modo sólo es posible cuando estamos Felices, pues de lo contrario, con la vibración baja el cuerpo siente la necesidad de un apoyo físico aunque esto lo haga más denso. Él accede al Circuito de Supervivencia, ya que no es la consciencia quien está controlando. Como la mayoría de nosotros estamos viviendo en el modo de la inconciencia, la inteligencia del cuerpo cumple su papel cerrada en el circuito de la supervivencia.
La franja vibratoria del campo de infinitas posibilidades, no está limitada solamente a aquellos que no ongieren alimentos físicos, puedes llegar a estos mismos etados dentro de una alimentación física conciente, o si el cuerpo está siendo alimentado por el prana también puedes usar el macanismo del discernimiento y transitar por los sabores sin perdes la conexión con la consciencia.
Para vivir de Luz es precisa la ecuanimidad, una condición mental y emocional establa, es preciso estar en la Presencia.
Existen algunos medios que permiten una expansión de la consciencia, una elevación mayor del campo vibratorio. Uno de ellos es la iniciación espiritual conocida como “Proceso de los 21 días”, en ella se observa un cambio en el sistema de creencias y la transmutación e los patrones limitantes, sucede una profunda limpieza física, emocional y mental que permita una percepción mayor, también se tiene la experiencia de la Felicidad Plena. Son 21 días sin comida, la primera semana sin ingerir absolutamente nada, ni agua; esta situación radical es necesaria para reconocernos libres de miedo, de rencores, de la posición de víctima, curar vicios mentales, disolver los coágulos emocionales y fortalecer la Fe.
En este proceso nuestro cuerpo reconoce el prana y utiliza esta energía sutil para crear materia, los componentes que el organismo necesita para vivir.
Consciencia Pránica es vaciar el vaso y percibir que el vacío es un universo de infinitas posibilidades, donde hay unidad, Amor, Paz y Felicidad.
Consciencia Pránica es un medio más que posibilita la conexión con lo Divino.


ENTREVISTA 4 PARTES:
http://suprememastertv.com/es/bmd/?wr_id=754&url=link1_2&page=0#v

1 comentario:

dailos dijo...

Hola, he visto que en su página hablan y saben mucho de conciencia pránica. Yo en los últimos años he estado viviendo y aprendiendo de la vida en Latinoamérica, y allí conocí el proceso de 21 dias de vivir de luz.

Quería comentarles que junto con otras 3 personas estamos ahora organizando un proceso de 21 dias en Extremadura, a 2 horas de Madrid, en un lugar precioso. Pensé que a lo mejor ustedes estaban interesados en esta información y les podría interesar de forma personal o para difundirla. Si les interesa o quieren más información les agradecería me respondieran a mi mail para poder enviarles un cartel que tenemos preparado y estar en contacto.

Además estaré en Madrid la semana que viene, junto con otra de las chicas que va a acompañar el proceso. Creo que ustedes están por allá. Nosotros estamos buscando lugares que estén interesados en esta información para organizar charlas al respecto, de una forma cercana, no una conferencia, si no reunirnos con la gente y hablar, preguntar, conocernos.

Un abrazo de luz.
Hasta pronto.